
…el Papa Francisco, en la reflexión acerca del Evangelio, señalaba que “la pandemia, al igual que a los discípulos del Evangelio, nos sorprendió como una tormenta inesperada y furiosa. Nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente. En esta barca, estamos todos… descubrimos que no podemos seguir cada uno por nuestra cuenta, sino sólo juntos. Que era necesario despertar y activar esa solidaridad y esperanza capaz de dar solidez, contención y sentido a estas horas donde todo parece naufragar”.